La suerte de Tomás

Tomás era un tímido tomate que vivía en el campo junto a sus amigos vegetales. Un día, se hartó de su ignorada vida y resolvió convertirse en superestrella de cine. Así que, con su admirable audacia, se marchó a Hollywood para hacer realidad su sueño.

Cuando llegó, se percató que no era fácil como imaginaba. Fue rechazado por todos los estudios de cine, que lo consideraban demasiado rojo y redondo para ser estrella. Pero Tomás no bajó los brazos y como todo tomate soñador, emprendió realizar su propia película.

Así fue como Tomás se convirtió en el primer tomate director de cine de Hollywood. Su película, “El gran tomate”, fue todo un éxito y él su estrella. Pero lo más extraordinario fue que sus amigos vegetales se unieron al reparto, y juntos protagonizaron la película más divertida y fresca de la historia del cine, hasta que, de pronto, apareció un chef vegetariano.

© David Auris Villegas. Escritor, columnista, pedagogo peruano y creador del ABDIV.